
Todos fueron buenos comentarios, alabando
la frescura de la puesta en escena y el reflejo de la vida que es la obra en sí misma.
Eva, Mónica, Claudia y Chus se volvieron a encontrar, y lo hicieron con ganas de no volver a separarse. Pero el teatro, como la vida, es así: hasta el próximo bolo!
Antes de despedirnos, nos fotografiamos para compartir y mantener vivo el momento.